Dios nos ha creado "abiertos" por dentro
y por fuera gracias a las dualidades
de nuestro "ser personal".
Así seremos "además", si queremos, de su
Vida.
Él lo desea ardientemente.
Glosa
a Juan A. García González: Existencia personal y libertad. Anuario filosófico
nº 95. 2009 p. 240.3
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario