Es un
experimento muy curioso: una isla en medio de un lago, se rodea con fuego
(mecheros de gas).
Dentro de
la isla está el alimento del chimpancé y se le condiciona para que vaya a comer
en una balsa, en la que hay un recipiente.
Se le
enseña que si toma agua del cubo con un cazo y la arroja al fuego, el fuego se
apaga.
Esto se
prepara así para que el chimpancé pueda, con su imaginación, establecer una relación condicional. Éxito de la
primera parte: el animal desembarca y come a su gusto.
Pues
bien, si se le da al chimpancé el cubo sin agua, repite automáticamente la
operación: intenta tirar agua con el cazo, aunque evidentemente no tira nada.
Así pues,
el chimpancé no ha hecho una cosa que cualquier ser humano hubiera hecho:
¿cuál? Tomar agua del lago.
El animal
no sabe "lo que es" el agua.
Si
ejerciera la inteligencia, pensaría que el fuego se apaga con agua; que
el agua esté en el cubo o no esté en el cubo es igual: en cualquier caso es
agua.
Para
conocer esto hace falta tener "la idea" de agua.
La
inteligencia se comprende ante todo así.
Es la
aparición del universal.
De
esto habla Polo en "Ética". Hacia una versión moderna de los temas
clásicos. 2ª edición. Unión Editorial. p. 52.2
Hablamos de la inteligencia en la etiqueta
6.2.1
De la imaginación en la
etiqueta 8.3.0
De la distinción
hombre-animal en la 4.6.1
Y de la evolución en la
9.1.0
.
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