.
El
peligro de Hegel, y más aún de Nietzsche, es la soledad.
Pensar a
Dios (Hegel) o la Nada (Nietzsche), como pura idea, como puro resultado o como
puro retorno.
Como
puro presente.
El ser Originario no es soledad.
Es finalidad
pura en el sentido de que es un Dar que lleva dentro su Aceptación y su
Don.
Dios no
es "Ya".
Lo
ventajoso de la exposición poliana de la distinción real entre el ser y la esencia
radica en presentar la finalidad o destino
como futuro gozoso y libre.
Si quieren ustedes leer
una síntesis de la distinción real esencia – acto de ser, vayan al principio de
este blog, a la página (en rojo) ""Esencia –
Ser. Su distinción"
No hay comentarios:
Publicar un comentario