.
En definitiva, dirá
Vargas, el crecimiento personal es tan distinto del esencial que tal vez no
convenga llamarlo crecimiento sino, para ser rigurosos, además y además.
Podemos así vivir
futurizando el presente. Podemos Vivir, viviendo. Más aún si encendemos (en el
ascensor) la pantalla de lo sobrenatural revelado.
Sin embargo, el
crecimiento personal también puede detenerse "aparentemente" en esta
vida. Y vivir sin Vivir.
En efecto, podemos ser
elevados naturalmente (eso es Vivir), teniendo los ojos cerrados (y también se
puede apagar la pantalla de nuestro futuro sobrenatural).
No vemos entonces el
sentido de la vida. El crecimiento personal se detiene
"aparentemente" (pues el plan de Dios sigue realizándose, adaptándose
a nuestro querer o a las circunstancias: Dios tiene siempre un plan B). Estamos
viviendo sin "Vivir".
Aunque podremos recuperar
un día el tiempo perdido. Si queremos. Porque si no queremos, Moriremos.
Si queremos, seremos
eternamente además en el Además.
Gracias al mito del ascensor acristalado podemos entender el crecimiento de
la persona humana. Se trata de una Página del Blog a la que se accede desde
este enlace : https://preguntaspolianas.blogspot.com/p/el-mito-del-ascensor-acristalado.html
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