Clase en Youtube de Juan Fernando Sellés : Varón y mujer

 


. He encontrado una clase de Juan Fernando Sellés : Teoría del conocimiento 6, en la que tras explicar la noción de persona aborda el tema de la diferencia varón - mujer.

Cada persona es única !

La igualdad no existe en la realidad...

El encargo que Dios nos da a cada uno cuenta con nuestra situación en el mundo.

La desventaja natural que tienen las mujeres se convierte en ventaja esencial, si lo hacen bien...

Al fin y al cabo, cada uno debe hacer fructificar sus talentos.

He aprendido mucho y ma ha complacido mucho.

Gracias, Juanfer.

Aquí va el enlace : 

https://www.youtube.com/watch?v=Vx2pctkOGK4

¿Qué entendía Polo al principio como “corazón”?

 


Al principio parece que Polo entendía por corazón lo neurálgico del hombre, que según el decir poliano sería de orden trascendental o del nivel del acto de ser.

 

Así, por ejemplo, escribe que el corazón humano se corresponde con Dios como con su tema.

 

De ser así, Polo tomaría el corazón según el significado bíblico. (Muchos entienden que el significado bíblico del corazón es la persona humana. Polo matizará esa idea).

 

También en un primer momento Polo indicaba que el corazón es sede de los afectos positivos y negativos.

 

Por lo demás, si la esperanza para Polo es personal, y vinculaba ésta al corazón humano  con ello admitía de algún modo la equivalencia entre persona y corazón. Esa equivalencia se encuentra también en inéditos polianos que responden a la grabación de conversaciones filosóficas.

¿Cambió Polo más tarde su manera de entender el corazón?

 


En su obra antropológica culminar, la Antropología trascendental, Polo matizó que el corazón no es el acto de ser personal humano, sino lo más profundo del ápice de la esencia humana, es decir, lo más cercano de ella al acto de ser personal.

 

El significado espiritual de la palabra corazón indica el profundo proceder de la esencia: su nivel más próximo a la persona”.

 

¿Por qué se sintió movido a llevar a cabo esta precisión? Seguramente porque advirtió que en las expresiones bíblicas en las que se habla de corazón no sólo hay un matiz de conocer y de amar personales, sino también de ‘constitución’ de acciones humanas manifestativas: “el corazón se distingue de la persona porque ésta no constituye el tema que busca”. En efecto, ni la libertad, ni el conocer, ni el amar personales son constituyentes de actos.

¿Es el corazón lo que constituye las acciones humanas manifestativas?

 


La dimensión humana que está en el origen de esa constitución es el hábito innato de la sindéresis, en concreto, la dimensión superior de las dos que Polo descubre en ella, a saber, el querer-yo.

El querer-yo constituye los actos de la voluntad.

Si tal dimensión humana ha dado origen a que se den vicios en la voluntad, Polo indica que “es aconsejable atenerse a la razón para atajar de algún modo los malos deseos que vienen del corazón.

 

En suma, para Polo el corazón equivale al ‘querer-yo’, que no sólo es constituyente de actos, sino también, claro está, cognoscente de los mismos; por eso se le puede llamar el fondo de la conciencia: “‘yo duermo, pero mi corazón vela” (Cant., VII, 2) es una expresión del fondo de la conciencia.

El amor es el celo que consume a querer-yo”. 


¿Qué es, en definitiva, el corazón para Polo?

 


Para Polo el corazón no es el ‘acto de ser’ personal humano, sino el ápice de la ‘esencia’ del hombre, el cual depende del acto de ser personal humano y activa a las dos potencias superiores: inteligencia y voluntad.
 
Como el ápice de la esencia del hombre, que equivale al hábito innato de la sindéresis, tiene dos dimensiones jerárquicamente distintas, la inferior o ver-yo, que activa a la inteligencia, y la superior o querer-yo, que activa a la voluntad y ambas son cognoscentes, el corazón según Polo coincide con el querer-yo, porque no solo conoce a la voluntad sino que también es constituyente de sus actos.
 
Por tanto, es de entre la esencia del hombre lo más cercano al acto de ser personal. 

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¿Podemos encontrar un rasgo "masculino" en los trascendentales personales?



Los trascendentales personales no son en sí ni masculinos ni femeninos.

Quizá podemos encontrar un rasgo masculino en el Intelecto personal.
En efecto, el Verbo es Entender penetrativo.

No es que el Intelecto sea masculino, sino que el mejor varón es el que entiende.


Del mismo modo, no es que la Coexistencia sea femenina, sino que la mejor mujer es la que ademasea (la que es humilde).
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¿Mujer y varón se diferencian sólo sexualmente?




Los animales viven al servicio de la especie.
Son macho y hembra sólo para la generación.
La hembra existe para poder continuar la especie.

Sin embargo, y esto es grandioso, la diferencia entre el varón y la mujer no es meramente sexual.

(Recuerden que los bienes del matrimonio son: los hijos, la fidelidad y el misterio. Si no hay hijos puede haber fidelidad e incluso si no hay fidelidad, siempre se abre la sexualidad al misterio).

Lo específicamente humano se alcanza de distinta manera según lo masculino y lo femenino.
La mujer no existe solamente para continuar la especie, para tener hijos. Aporta su propia modalidad.

La diferencia entre la mujer y el varón afecta a lo natural y a lo psíquico, a lo sentimental ligero u hondo, a la manera de pensar y de querer, al modo de manifestarse la persona.

Por eso hablamos de tipo femenino y tipo masculino.

Esta es la primera distinción típica de la humanidad, la primera modalización de la especie humana, del punto de vista social.

Eso no quiere decir que el ser mujer o el ser varón caracterice absolutamente a la persona humana. 

Cada persona humana es un tipo completo y lo que la caracteriza es su don entero, su vida cabal, la comunión que Dios espera de ella y no el modo (femenino o masculino) de realizarla.

Lógicamente, querer hacer algo bien, al modo femenino, cuando se es varón, es un despropósito, a lo más un juego. Probablemente una pérdida de tiempo (aunque pueda recuperarse ya que incluso nuestros desvaríos más absurdos son ocasión para añorar más el hogar).

Para que el don sea cabal, la mujer deberá esforzarse para realizarlo al modo femenino y el varón al modo masculino. 
Si no, es como querer correr a la pata coja. 
Aunque nos divierta.





Para saber más:
6.1.0 especies y tipos;

1.11.0 mujer
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Rápidamente ¿qué es el alma?

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El alma es, a la vez, forma del cuerpo y  manifestación de la persona.

Rápidamente ¿quién es la persona?

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Persona, rápidamente es la relación subsistente originaria o, en el caso de las personas creadas, relaciones subsistentes en el orden del Origen.
 
Noten la distinción entre ser personal y el acto de ser del universo físico (denominado "persistencia" por Polo).

El universo físico es la persistencia subsistente en el orden del Origen. Depende del Origen en el modo sencillo de la persistencia.
 
La persona creada es, sin embargo, la relación subsistente en el orden del Origen, es decir, dependencia del Origen en el modo de relación insistente, intensiva "hacia" el Origen (insistencia subsistente en el orden del Origen.
 
Las Personas en Dios (la Trinidad) son relaciones subsistentes originarias.
 
La persona es pues un ser abierto a la trascendencia. Por tanto, radicalmente libre.
 
Libre para destinarse, si quiere. Responsable.
Su verdad le inspira a dar-se.
 
La persona (Juan A. Gz) sabe de sí.
La persona rebrota. Sabe más de sí.
 
La "intensidad" de la insistencia hace referencia a la "esencia", que en Dios se identifica (Esencia divina) con cada una de las personas y en las personas humanas es más o menos intensa según el grado de santidad.




Estudiamos la intensidad y la transparencia en la etiqueta 5.4.4

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¿A qué llamé corazón siguiendo la Antropología poliana?

 


Propuse llamar “corazón” a la intimidad de la persona humana.

 

Persona, corazón, espíritu e intimidad serían, según esa propuesta, equivalentes.

 

El  Catecismo de la Iglesia católica, cuando nos da la clave del sentido bíblico del "corazón", en el nº 368, dice que el corazón es el "fondo" de nuestro ser".

 

Pensé que podíamos comprender ese “fondo”, como la persona, el espíritu o la intimidad que somos.

 

Mi corazón, según esta propuesta que, en un principio, fue poliana, es “la persona” que soy.

El espíritu que soy. La intimidad que soy. Mi acto de ser personal.

 

Pero más tarde, Polo matizó el sentido bíblico del “corazón” que en realidad no es equivalente al acto de ser personal.


¿Qué dice el Catecismo de la Iglesia Católica (n.2563) sobre el corazón?

 



CEC 2563 El corazón es la morada donde yo estoy, o donde yo habito (según la expresión semítica o bíblica: donde yo “me adentro”). Es nuestro centro escondido, inaprensible, ni por nuestra razón ni por la de nadie; sólo el Espíritu de Dios puede sondearlo y conocerlo.

 

El corazón e.Es el lugar de la verdad, allí donde elegimos entre la vida y la muerte. Es el lugar del encuentro, ya que a imagen de Dios, vivimos en relación: es el lugar de la Alianza.