Noten la distinción entre ser personal y el acto de ser del universo físico (denominado "persistencia" por Polo).
El universo físico es la persistencia subsistente en el orden del Origen. Depende del Origen en el modo sencillo de la persistencia.
La persona creada es, sin embargo, la relación subsistente en el orden del Origen, es decir, dependencia del Origen en el modo de relación insistente, intensiva "hacia" el Origen (insistencia subsistente en el orden del Origen.
Las Personas en Dios (la Trinidad) son relaciones subsistentes originarias.
La persona es pues un ser abierto a la trascendencia. Por tanto, radicalmente libre.
Libre para destinarse, si quiere. Responsable.
Su verdad le inspira a dar-se.
La persona (Juan A. Gz) sabe de sí.
La persona rebrota. Sabe más de sí.
La "intensidad" de la insistencia hace referencia a la "esencia", que en Dios se identifica (Esencia divina) con cada una de las personas y en las personas humanas es más o menos intensa según el grado de santidad.