.
La intimidad se incorpora al vocabulario filosófico sobre todo a partir de Agustín de Hipona, que es uno de los grandes glosadores de Pablo de Tarso.
Dios es más íntimo a nosotros que nuestra intimidad.
Pero atención, intimidad no es lo mismo que "inmanencia".
La intimidad de la persona es más radical que la inmanencia
cognoscitiva.
Y más radical incluso que el amor como virtud.
Intimidad designa el co-ser
personal, precisamente, el conjunto de "radicales" de la persona
humana, trascendentalmente dualizados.
Designa, también, la dualidad radical nacer-destinándo.se
Intimidad es acompañar-se.
Polo señala que ser acompañándose
es una expresión «sólo indicativa; considero preferible (dice Polo) esta
otra: co-existir es la amplitud interior del acto de ser humano, es decir, la ampliación trascendental».
De esto
habla Polo en Antropología Trascendental I, p. 208, nota 12.
La intimidad se incorpora al vocabulario filosófico sobre todo a partir de Agustín de Hipona, que es uno de los grandes glosadores de Pablo de Tarso.
Y más radical incluso que el amor como virtud.
Designa, también, la dualidad radical nacer-destinándo.se
No hay comentarios:
Publicar un comentario