Páginas

¿Es el pecado original un pecado de ciencia?

.
Sí. El pecado original es un pecado de ciencia.
Es la ciencia del bien y del mal.

La ciencia de Dios es sólo para el bien.

Descubrir que podemos actuar sin Dios es la ciencia del bien y del mal.

Dios no puede hacer el mal.

Decir que podemos ser Dios al comer el fruto del árbol de la ciencia del bien y del mal es la gran mentira del mentiroso.

Es el engaño que nos deja huérfanos.



.

¿Qué es el pecado original?

.
Un estado de privación. Una carencia con la que todos nacemos. La orfandad original.

Polo defiende la existencia de una revelación primitiva por la que los hombres fueron conscientes de esa carencia.

El hombre se dio cuenta de que no conocía y amaba a Dios como debiera.

¿Por qué? Porque nos hemos alejado, desde el origen, de Dios.


Hablamos de la revelación primitiva en la etiqueta 9.1.0


.

¿Es el cuerpo humano inmortal?

.
El cuerpo del hombre, como el de los animales, desparecerá por razones biológicas.

Sin embargo, el cuerpo humano es inmortal en la medida en que es esencializado.

Pongamos un ejemplo. Mi espíritu podrá siempre volver al día en que mi madre me compró el libro "Aventura en el río".

Podremos reconocer como "nuestros" los ámbitos en los que el cuerpo se ha prolongado, sea en obras culturales, sea en expresiones simbólicas corporales.

Si la unión entre alma y cuerpo es más completa somos inmortales.

Incluso los cuerpos de los niños abortados vivirán en la mente de quien los amó y ama, en la memoria de Dios, que es eterna.

Si somos de carne y hueso es porque para nuestra alma el cuerpo es aún opaco. Debemos abrirlo, con gestos, con símbolos, con trabajo.

En el Paraíso los cuerpos eran transparentes. Adán conocía su sentido, por eso pudo dar su nombre a cada cosa. La presencia de Satán enturbió la mirada y apareció la muerte.

Glosa a Urbano Ferrer. Consideraciones sobre la relación mente-cerebro. Studia Poliana 11,  p.56.3


.

¿La prohibición de comer del árbol es meramente normativa?

.
No.

La proposición poliana de profundizar en la distinción real de acto de ser y esencia permite comprender que la prohibición de comer del árbol del Paraíso es mucho más que una prohibición normativa.

Es una prohibición ontológica.

Esa prohibición ontológica consiste en decir que el hombre no puede disponer de su disponer. La esencia humana es el disponer "indisponible". No debemos manipular nuestra naturaleza reduciéndola a nuestro capricho, haciéndonos señores del bien y del mal.

Disponemos del mundo, disponemos aceptando y dando dones a los otros, pero no podemos prescindir de nuestra manifestación: siempre tendremos que dar cuenta de nuestro actuar. No somos autonomía absoluta.

La persona que somos no "domina" su esencia. Nuestra esencia es distinta realmente de nuestro acto de ser.
Nuestro acto de ser es la persona que somos, y la persona que somos no se hace a sí misma con su disponer, porque su disponer, aunque tenga una cierta antecedencia, es solamente uno de los encauzamientos posibles de la persona, de la libertad de la persona, sin confundirse con la persona que es más amplia (está incluida en el ámbito de la máxima amplitud). La persona que somos "desborda" y es responsable, ante Dios y ante los demás, de su disponer. Su "disponer" no es solo suyo

Si tristemente el hombre quiere reducirse a su despliegue solitario, le acaece lo que se llama conversión a las criaturas. Pretende "cosificar" su esencia, por lo que se cosifica a sí mismo.

Es ahí donde está la tragedia humana. La prohibición de comer del árbol no es meramente una prueba de obediencia, sino la señalización de la condición ontológica de criatura libre.

Querer disponer de nuestro disponer es contrario a la distinción real de "esencia humana" y "acto de ser personal", pues por un lado se pretende que el acto de ser sea el disponer del disponer, reduciéndose a disponer y perdiendo la libertad.

Y por otro lado, al querer identificar la persona con su disponer, se pretende no ser criatura. Eso es querer ser como Dios.

En efecto, en Dios Ser y Esencia se identifican. Dios Es lo que Es.

Si la persona humana fuera solamente lo que es su esencia, no habría distinción real, pues sería sólo lo que es. (Ésa es la pretensión de Nietzsche: querer que el yo sea solo voluntad, querer. Pensar que el ser que soy son solo mis obras).

La persona humana no dispone de su disponer (de su esencia), sino que dispone con su esencia (con su disponer) y dará cuenta de su disponer.

Inspirado en el Cuaderno de Polo sobre la esencia humana p.108.5


.

¿Podemos entender filosóficamente "la caída" trascendental del hombre?

.
Sí.
No es solamente un dato de la Revelación judía y cristiana. El pecado original, la caída, puede ser entendido desde la antropología trascendental.

No es tampoco una originalidad poliana.

Platón, por ejemplo, habla de caída y redención.

Rousseau habla del instante dichoso que hizo de un animal estúpido y limitado, caído, un ser inteligente.

También Kant hace una interpretación de la caída, considerándola como la condición de posibilidad de la libertad.
No hacer caso a la propia naturaleza, dice, es lo que hace posible la libertad, lo que abre la posibilidad de que el hombre se haga a sí mismo.
Dice por ejemplo en "En defensa de la Ilustración": el primer paso fuera del estado de naturaleza fue, por el lado moral, una caída… la historia de la naturaleza comienza, por tanto, con el bien, pues es la obra de Dios; la historia de la libertad con el mal, pues es la obra del hombre.

La caída es así, según Kant, emancipación, quedando la vida del hombre en sus propias manos y cerrando la vía antropológica hacia Dios.

Polo dirá que la postura de la Ilustración es un postulado ilusorio, que sólo se sostiene porque nunca se logrará disponer completamente de sí. Si consiguiéramos "realizarnos" completamente ¿para qué nos serviría, si no encontráramos quien recibiera nuestro don?

La caída es caída. Es "ignorar" que no tenemos réplica en nuestro interior, y por eso ignorar también que sólo con el autotrascendimiento alcanzaremos a saber quiénes somos.

Si la dinámica racional o voluntaria se absolutiza, comparece la nada (Polo, La persona humana y su crecimiento, p. 192).

De esto habla Rafael Corazón en su artículo "Antropología trascendental y Antropología teológica", en el libro homenaje a Ignacio Falgueras, Autotrascendimiento (J.A. García y J.J. Padial) p. 311.2 y 317.3

En cuanto a la "nada", pueden ustedes ir a la página "Distinción. Nada. Creación" en lo alto de este blog.


.

¿Cómo explica BXVI el pecado original en la Audiencia del 6 de febrero de 2013?

.
Copio lo que dijo :

"De los relatos de la creación, me gustaría destacar una última enseñanza: el pecado engendra el pecado y todos los pecados de la historia están interrelacionados. Este aspecto nos lleva a hablar de lo que ha sido llamado el "pecado original".

¿Cuál es el significado de esta realidad, difícil de entender? Quisiera sólo dar algún elemento.

En primer lugar, debemos tener en cuenta que ningún hombre está encerrado en sí mismo, nadie puede vivir de sí mismo y para sí mismo; nosotros recibimos la vida del otro y no sólo en el nacimiento, sino todos los días.

El ser humano es relación: Yo soy yo mismo solo en el tú y a través del tú, en la relación de amor con el Tú de Dios y el tú de los otros. Pues bien, el pecado perturba o destruye la relación con Dios, su presencia destruye la relación con Dios, toma el lugar de Dios.

El Catecismo de la Iglesia Católica afirma que con el primer pecado el hombre “hizo elección de sí mismo contra Dios, contra las exigencias de su estado de criatura y, por tanto, contra su propio bien” (n. 398). Perturbada la relación fundamental, son puestos en peligro o destruidos también los otros polos de la relación, el pecado arruina las relaciones, así lo destruye todo, porque nosotros somos relación.

Ahora bien, si la estructura relacional de la humanidad viene malograda desde el principio, todo hombre entra en un mundo marcado por esta alteración de las relaciones, entra en un mundo perturbado por el pecado, que le marca personalmente; el pecado inicial daña y hiere la naturaleza humana (cf. Catecismo de la Iglesia Católica, 404-406).

Y el hombre, por sí solo, no puede salir de esta situación; sólo el Creador puede restaurar las justas relaciones. Sólo si Aquel, del que nos hemos desviado, viene hacia nosotros y nos tiende la mano con amor, las justas relaciones pueden reanudarse. Esto se realiza en Jesucristo, que cumple exactamente el recorrido inverso al de Adán, como describe el himno del segundo capítulo de la Epístola de San Pablo a los Filipenses (2:5-11): mientras que Adán no reconoce su ser criatura y quiere ponerse en el lugar de Dios; Jesús, el Hijo de Dios, está en una perfecta relación filial con el Padre, se rebaja, se convierte en el siervo, recorre el camino del amor humillándose hasta la muerte en la cruz, para reordenar las relaciones con Dios. La Cruz de Cristo se convierte así en el nuevo Árbol de la vida".


 .

¿A qué llamamos Inteligir personal?

.
A uno de los cuatro trascendentales personales descubiertos por Polo.

Es Intellectus ut co-actus.

Los antiguos le llamaban "intelecto agente", pero Polo asigna la función clásica del intelecto agente a sus hábitos innatos.

Concretamente, la iluminación de los fantasmas la atribuye a la sindéresis, hábito nativo a la sabiduría (que a su vez es hábito innato del Inteligir personal).


.

¿Qué es el intelecto?

.
Luz.

El intelecto es luz.
La persona, en tanto que conoce, es luz.

Polo llama intellectus ut co-actus al Inteligir personal, uno de los 4 trascendentales personales por él descubiertos.

También se puede llamar a este radical personal "Entender", y se convierte con la persona humana. Los cuatros trascendentales o radicales personales se convierten con ella.

La persona es Inteligir personal.

Luz-además-luz.

Para saber más:
Sobre la luz:………….Etiqueta 2.0

Sobre el además:….Etiqueta 5.5.0
.

¿Cuál es el tema del Inteligir personal?

.
El además.
(Que aquí podemos designar como transparencia).

El método del Inteligir personal es el hábito de sabiduría (que es el carácter de además).

Su tema es también el además.

Además y además.

La persona humana, libertad trascendental, es inclusión atópica en el ámbito de la máxima amplitud, Dios.

El tema del Intelecto personal humano (intellectus ut co-actus) es precisamente esa máxima amplitud.

¿Quién soy? La respuesta no acaba nunca, pues soy "además". Mi identidad (o inidentidad) se corresponde con la infinitud de mi Origen.

El carácter de "además" se distingue de la Identidad (Dios) y es creado. El hombre no añade nada a Dios (Dios y la criatura no son un todo).

Sin embargo, la interioridad de la Identidad, es decir, Dios dentro de mí, no anula mi identidad.
Dios me crea dentro de sí y habita dentro de mí creándome como "además", si quiero. Como soy libre, puedo tarir la fuente y cosificarme.

Pero también puedo, libremente, dar gloria a Dios, pues mi ser es, por dentro, infinitamente "intenso". Mi réplica, de la que carezco en mi interior, la "encuentro" más adentro que mi interior. Es mi "verdad", que se corresponde con el además.



De esto se habla en Antropología trascendental. I. La persona humana. p.194, nota 58
.

¿Qué es lo más característico del intelecto?

.
El intelecto ut co-actus es uno de los cuatro trascendentales personales descubiertos por Polo.
Y se caracteriza por su "transparencia".

Transparencia significa luz atravesada de luz.

La luz del intelecto no es como la luz física, que es sólo un vehículo para impresionar nuestra retina.
La luz del intelecto es luz con contenidos, es un poseer lo conocido.
Pero atención, lo conocido es distinto del conocer. Si no fuera distinto, no se conocería nada.

La retina posee la impresión sensible, pero no la conoce.
Conocer es poseer, guardando su interna diafanidad desde la cual puede serlo todo.

Transparencia es eso, luz, intrínsecamente atravesada de luz que va iluminando la realidad.
Lo inteligido es luz, y según la libertad (según la posibilidad irrestricta de conocer), el intelecto la acoge en su interior.

El intelecto es trascendental, el ser personal es así, es también transparencia y el desvelamiento de ese co-ser que somos, es precisamente la verdad trascendental o la verdad como trascendental.

Clásicamente se dice que la verdad aparece en el juicio. La expresión es correcta pues si decimos que este perro es negro, siéndolo, poseemos la verdad.
Pero la poseemos porque en nuestro interior aletea la verdad trascendental. Es el intelecto personal que somos el que sabe que lo que va apareciendo es luz que está atravesando nuestra transparencia.

De esto habla Polo en Antropología trascendental I, p. 119.3
Para saber más sobre:
la transparencia, ver etiqueta 5.4.4
la luz, ver etiqueta 2.0.3
la verdad, ver etiqueta 5.2.1


.

¿Cómo comprender el intelecto desde el carácter de "además"?

.
Lo que Polo llama carácter de "además" resulta difícil de exponer.

"Además", entre otras cosas, designa al hábito innato de sabiduría. Siempre conoceremos más de lo que conocemos.

Pero detengámonos un momento en un hábito nativo al inteligir personal, la sindéresis.
La luz del intelecto personal puede iluminar gracias a su hábito de sindéresis, (a través del ver-yo, que activa la inteligencia), los hábitos adquiridos y las operaciones propias del conocer objetivo. Por eso podemos decir que el intelecto personal es una luz que conoce "además" de lo conocido a través del "objeto". No se limita a conocer el "objeto" presente. Conoce más. Gracias a la sindéresis es "además".

La luz del intelecto personal es "además", es inagotable, de ella deriva el conocimiento propio del alma humana, que se puede hacer todas las cosas.

Pero la cosa no se queda ahí. El intelecto personal está atravesado por otra luz, la luz del hábito innato de sabiduría, que es además del además.
O además y además.

El intelecto personal se abre así a la búsqueda de más luz. Podemos conocer más adentro de nuestra intimidad.

Para entender el Intelecto personal, no basta pues, considerarlo como una luz que separa la forma de la materia y la posee inmaterialmente.
Eso es poco. El Intelecto personal es transparencia que deja ver más.
Además y además.

De esto habla Polo en Antropología trascendental I, p. 119.3-4

Para saber más sobre:
la transparencia, ver etiqueta 5.4.4
el carácter de además, ver etiqueta 5.4.0


.

¿A qué llamamos búsqueda?

.
La libertad es acto vital que, si no se estraga, busca siempre, congruentemente, nuevas facetas de los temas trascendentes: el mundo, las personas y, ah!, Dios.

La búsqueda es un trueque por el que el carácter de además se priva de su valor metódico. El Inteligir personal olvida su sabiduría (su ser además), orientándose al tema que lo trasciende: Dios.

De esto se habla entre otros lugares en  Juan A. García. La metalógica de la libertad… Studia Poliana nº 10, 2008, p. 20


Para saber más:
Sobre la metalógica de la libertad: ………Etiqueta 6.8.0
Sobre la libertad trascendental: …………..Etiqueta 5.5.4  
Sobre la dinámica de la libertad:…………. Etiqueta 6.9.0
Sobre el don:………………………………………… Etiqueta 6.9.1
Sobre la búsqueda: ……………………………….Etiqueta 6.9.4
Sobre el carácter de además:……………... Etiqueta 5.4.0 
Sobre el además :………………………………… Etiqueta 5.5.0
Sobre el Inteligir personal:………………….. Etiqueta 5.5.2


.

¿A qué podemos comparar la luz del entender?

.
A una puerta que desvela el Ser.

Mi amigo, el buen misionero, padre Roberto, me escribió: "A la puerta de la fe". 
Act 14, 27 : al llegar, reunieron a la iglesia y contaron todo lo que el Señor había hecho por mediación de ellos y cómo había abierto a los gentiles la puerta de la fe.

cfr. Col 4, 3 : orad por nosotros para que Dios nos abra una puerta a la predicación, y podamos hablar del misterio de Cristo, para que lo dé a conocer como debo hacerlo.

1 Cor 16.9 : pues se me ha abierto una puerta amplia y prometedora.

2 Cor 2 12 : cuando llegué a Tróade, para anunciar el Evangelio de Cristo, aunque se me había abierto una puerta en el Señor.


.

¿Qué dualidad nos da la clave para comprender el modo de operar de la inteligencia?

.
El binomio intellectus / ratio (noús y logos) nos da la clave para comprender el modo de operar de la inteligencia.

Sin embargo, no olvidemos nunca que aislar  "Inteligir" de "Inteligencia" es un error pues se "suponen" dos sujetos. La persona humana es dual, pero no está compuesta de piezas que se puedan analizar y aislar. La inteligencia (logos) es manifestación o disposición del inteligir (intellectus), aunque por motivos didácticos los podamos estudiar sucesivamente.

Intelecto (nous en griego) en la filosofía aristotélica es la capacidad de captar directamente contenidos inteligibles. La comprensión de lo inmediato.

Polo distingue tres dimensiones :

"Intellectus ut potentia", refiriéndose a lo que clásicamente es llamado "inteligencia", una potencia del alma.  El Inteligir humano es potencia, capacidad de crecimiento. (don Ignacio Falgueras añade que la potencia obediencial es también potencia y vida).

"Intellectus ut habitus", refiriéndose al clásico hábito de los primeros principios. Pero también al hábito de sabiduría y el hábito de sindéresis. Los tres innatos al Inteligir. El Inteligir humano es acto-potencial. Los hábitos indican perfección que abre la puerta a un mayor crecimiento.

"Intellectus ut actus", refiriéndose al clásico intelecto agente, pero proponiendo que se le considere como uno de los 4 trascendentales personales que describe en su Antropología : el "Inteligir personal". El Inteligir humano es acto. Es transparencia.

Y ahora hablemos del logos:
Razón (logos en griego) es el camino de lo inmediato a lo mediato.
La razón posee una notable versatilidad, a veces es deductiva, otras veces no, porque los niveles cognoscitivos se entrelazan.
Hay muchas modalidades racionales.
Crecemos y los niveles cognitivos se entretejen.
La razón es de manifestación, disposición, perfección que llamamos esencial.

En lo alto del blog encontrarán el enlace a la página "inteligir humano".


.

¿Cómo es posible que el intelecto personal pase de un tema a otro?

.
El intelecto personal pasa de un tema a otro porque el acto vital que es la persona, es decir, su libertad trascendental, es un método siempre insatisfecho. Es "además".

Recordemos que "método" significa cualquier actividad intelectual.

Allá dentro nunca estamos quietos, parecemos el fuego luminoso de un volcán.
Esta "actividad" que es el ser personal se refleja en la Antropología trascendental poliana pues encontramos frecuentemente comparaciones e interrelaciones entre las distintas dimensiones del método del abandono del límite mental, propuesto por Polo y que también se asemeja al fuego.

Incluso en la otra vida. Cuando ya no "necesitemos" desdoblarnos con hábitos, pues ya gozaremos del encuentro definitivo con Dios, que nos habrá dado la piedrecita blanca (nuestra identidad), seguiremos jugando, cantando, no "necesariamente", sino libremente, con la libertad de los hijos de Dios.

De esto se habla en Juan A. García. La metalógica de la libertad… Studia Poliana nº 10, 2008, p.  10.2

Para saber más:

Etiqueta 6.8.0  metalógica de la libertad
Etiqueta 2.1.1     el método del abandono
Etiqueta 5.5.4    libertad personal
Etiqueta 2.11.0.  Método-Tema


.

¿Cómo juega el Inteligir personal con la inteligencia humana?

.

El Inteligir personal es el "entender" trascendental.

Es creado. Dios lo ha hecho luz transparente.

Dios lo ha incluido en su seno, ahí donde su Hijo, que es Entender. Que es Luz de Luz.

El Inteligir personal humano, si quiere, deja transparentar la Luz.
No es idéntico, depende libremente de la Luz.

Pero al dejar transparentar la Luz, es luz que ilumina. Es luz de Luz.

Lo iluminado es irrestricto, es potencia intelectual (inteligencia) de crecimiento ilimitado. Es apertura infinita en cuanto que es activada por el Inteligir personal. Que es luz de Luz.

Pues bien, el Inteligir personal va jugando, descubriendo y relacionando los principios, va formalizando la inteligencia humana (la capacidad irrestricta de nuestro conocimiento) gracias a esos principios, ya sean primeros principios o principios segundos.

La inteligencia humana se refiere a principios.

El Inteligir personal juega, como con un caleidoscopio, formalizándose según los principios. Un caleidoscopio irrestricto. Pues El Inteligir personal es además (luz de Luz).


Pueden ustedes ir a la página "inteligir humano", en lo alto del blog.

 .

¿Es necesaria la antropología?

.
El filósofo se interesa necesariamente por la antropología.

No se puede hacer metafísica si no se hace antropología.

No se pueden ir desvelando las dimensiones más profundas de la realidad sin que, correlativamente, aparezcan dimensiones humanas.




Glosa a Polo en Introducción a la Filosofía, p.42.4
.

¿A qué se llama Antropología trascendental?

.
A la Antropología centrada en la persona, en lugar de estar centrada, como otras antropologías, en el cuerpo humano, o en la cultura (antropología cultural), o en el alma y sus potencias (antropología racional).

La Antropología trascendental es la parte más alta de la filosofía.

Persona es sinónimo de espíritu.


.

¿Proviene el hombre del universo?

.

El universo no es capaz de crear al hombre, ni de contenerlo.

El ser como fundamento (el universo) es sencillo, mientras que el hombre es dual.

El hombre no es una esencia mundana. Sólo su cuerpo forma parte, también, de la esencia del universo.

.

¿De dónde viene el hombre?

.

El hombre no proviene del universo.

Es creado directamente por Dios.

.

¿Cuál es la clave de la antropología?

.

La clave de la antropología es una nota característica del ser humano que Polo llama "dualidad".

El "Ser de Dios" es simple.
El "ser del universo" es sencillo.
El "ser humano" es dual.

No se trata de que el hombre esté escindido en un dualismo de dos elementos, o que sea uno y otro.

El ser humano es, desde sí, en dualidad.

En su unidad sigue vigente la dualidad.

El ser humano es inagotable. Su unidad no es unicidad, sino resurgimiento, redundancia.

No es que sea un solitario principio inagotable, sino que, al ser hijo, el hombre puede siempre recibir y dar más. "Además".

.

¿Cuál es la cumbre de la antropología griega?

.

El concepto de virtud.

El hombre se mejora. Es capaz de mejorar su naturaleza y alcanzar metas imprevisibles.

Glosa a Leonardo Polo. Tener y Dar. En "Sobre la existencia cristiana" p. 127.2

.

¿Cuál es el cauce de la antropología cristiana?

.

El concepto de virtud.

El hombre es capaz de mejorarse, de mejorar su naturaleza y alcanzar metas imprevisibles.

Entonces, puede responder libremente a la iniciativa divina, a su misterio de amor.

El hombre es un hijo que puede cantarle a Dios, con su vida, con su trabajo, con su arte.

Glosa a Leonardo Polo. Tener y Dar. En "Sobre la existencia cristiana" p. 127.2

.

¿Por qué la virtud es el punto de enlace entre la antropología griega y la cristiana?

.

Porque la noción de virtud es la cumbre de la antropología griega y, por decirlo así, el cauce de la cristiana.

Una sentencia de Tomás de Aquino dice que todas las religiones han entrevisto que Dios es sabiduría, Lógos. En Dios habría inteligencia y, por tanto, verdad, aunque sea de una manera vaga. Pero ninguna ha vislumbrado que Dios es amor.

Los cristianos sabemos que Dios es Amor. La sentencia de Tomás de Aquino nos sirve para entender la diferencia de la antropología griega con la cristiana, en la que rige el Amor.

Gracias a la virtud podemos amar más.
El don de nuestra vida es creciente, si queremos.
Somos "además" de Dios, otorgándole nuestro don creciente, gracias a la virtud.

Para saber más sobre la virtud : etiqueta 6.2.5

.

¿Confunde Polo su Antropología trascendental con la Antropología teológica?

.

El intelecto personal pasa de un tema a otro porque el acto vital que es la persona, es decir, su libertad trascendental, es un método siempre insatisfecho. Es "además".

Recordemos que "método" significa cualquier actividad intelectual.

Allá dentro nunca estamos quietos, parecemos el fuego luminoso de un volcán.
Esta "actividad" que es el ser personal se refleja en la Antropología trascendental poliana pues encontramos frecuentemente comparaciones e interrelaciones entre las distintas dimensiones del método del abandono del límite mental, propuesto por Polo y que también se asemeja al fuego.

Incluso en la otra vida. Cuando ya no "necesitemos" desdoblarnos con hábitos, pues ya gozaremos del encuentro definitivo con Dios, que nos habrá dado la piedrecita blanca (nuestra identidad), seguiremos jugando, cantando, no "necesariamente", sino libremente, con la libertad de los hijos de Dios.

De esto se habla en Juan A. García. La metalógica de la libertad… Studia Poliana nº 10, 2008, p.  10.2

Para saber más:

Etiqueta 6.8.0  metalógica de la libertad
Etiqueta 2.1.1     el método del abandono
Etiqueta 5.5.4    libertad personal
Etiqueta 2.11.0.  Método-Tema
.

¿Cuál ha sido la rectificación más importante a la antropología de Aristóteles?

.

Decir que la voluntad no es inferior a la inteligencia.

Es una tesis cristiana.
Ningún antropólogo cristiano ha aceptado que la voluntad sea "sólo" tendencia, porque si la voluntad fuese sólo tendencia y, por lo tanto, fuese imperfección, Dios no podría tener voluntad.

Aristóteles sostiene que amar es desear y como Dios lo tiene todo, lo es todo, no puede desear.

Los cristianos sabemos, sin embargo, que Dios es Amor.
La voluntad no puede ser sólo tendencia, sino que tiene que ser algo más que deseo.
La voluntad es capaz de otorgamiento amoroso.
Es capaz de efusión.

La voluntad también es capaz de acto perfecto, aunque nunca se detenga.

De esto habla Polo en su artículo "Tres dimensiones de la Antropología", aparecido en Studia Poliana, 13, (2011), p. 24.2.


Para saber más.
Sobre la filosofía cristiana:……………Etiqueta 7.8.0
Sobre la naturaleza humana:……….Etiqueta 6.1.0
Sobre el hombre:………………….……….Etiqueta 1.10
Sobre el deseo:………………….….………Etiqueta 1.9.3
Sobre el acto:…………………………..……Etiqueta 1.2.1
Sobre las aporías de Aristóteles:....Etiqueta 20.4.5
Sobre la Antropología:………………….Etiqueta 5.1.0
Sobre la voluntad:…………………………Etiqueta 6.2.2

.

¿Qué aporta la antropología cristiana a los saberes humanos?

.

Por decirlo rápidamente, la antropología cristiana porta la comprensión no solo hiperformal, sino hiperteleológica del hombre.

El hombre no solo tiende a la felicidad, sino que va más allá del tender.

¿Qué puede haber más allá de la tendencia a poseer y de la posesión misma de la felicidad? Obviamente, el donar. Si la actividad del amor es donante, trasciende lo que los griegos entendían por télos.

He aquí la hiperteleología cristiana.

Donar es dar sin perder, la actividad superior al equilibrio de pérdidas y ganancias.

Dios es Dar y el hombre, hijo de Dios, es también dar, "además".

El aprecio por la verdad, por la capacidad humana de conocer, se lo debernos en gran parte a los griegos. La dimensión amorosa elevada a culminación, la debemos evidentemente al cristianismo.

Desde el punto de vista filosófico, quien ha incorporado el amor al planteamiento cultural de Occidente, quien ha contribuido a su expresión literaria extensa, es Agustín de Hipona. Por eso a San Agustín se le llama el padre de Europa.

¿Podemos hablar de "dimensiones" de la antropología?

.

Juan Fernando Sellés ha tenido el acierto de publicar en Studia Poliana nº 13 un artículo de Polo muy sencillo, en el que expone diversas dimensiones humanas y que le permiten distinguir entre tres antropologías diversas en la historia de la filosofía:

- la constitucional, de corte griego;
- la dinámica, de cuño moderno;
- la trágica, de impronta existencialista contemporánea.

Como propuesta de solución a la visión dramática que ofrece esta última, añade, al final del trabajo, la antropología teándrica, la cual permite dotar de sentido al problema del dolor.

Como la problemática subyacente a esas antropologías es siempre actual, podemos considerarlas como ciertas "dimensiones" de la antropología:

a) Hay una dimensión constitucional, que responde a la pregunta ¿qué es el hombre? Un ser capaz de tener, o mejor, como afirma Polo, capaz de dar.

b) Hay una dimensión dinámica, que responde a la pregunta ¿quién es el hombre? Pero que se puede enfocar, o mirando al pasado (las condiciones de posibilidad), o mirando al presente (por ejemplo, Rousseau), o mirando al futuro, como hace Polo al caracterizar al hombre como "espíritu en el tiempo".

c) Hay una dimensión trágica, que no sabe responder a las preguntas ¿qué es el dolor?, ¿qué es la muerte?

d) Y hay una dimensión teándrica, que responde a la pregunta ¿qué es ser hijo de Dios?

De esto habla Polo en su artículo "Tres dimensiones de la Antropología", aparecido en Studia Poliana, 13, (2011), p. 15.

Para saber más:
Sobre el hombre:………………….Etiqueta 1.10
Sobre la Antropología:………….Etiqueta 5.0.0
Sobre el dolor:……………………..Etiqueta 8.5.0
Sobre la muerte:……………….…Etiqueta 10.0.0
Sobre el tener:………………….…Etiqueta 1.9.1
Sobre el dar:…………………….….Etiqueta 1.0.2
Sobre el tiempo:……………….…Etiqueta 1.12.0
Sobre la filosofía cristiana:……Etiqueta 7.8.0
 .