Páginas

¿En qué consiste la naturaleza humana?

 .


La naturaleza humana consiste en el cuerpo humano y en sus potencias espirituales.
Es la vida recibida de nuestros padres.
Pero atención, no se puede separar la naturaleza humana concreta de la persona, de quien es expresión.
No hay naturaleza humana sin persona.
 
El momento en que una naturaleza deviene “humana” es el momento de la concepción, instante en que la persona es creada por Dios (y los padres procrean).
No hay cuerpo “humano” sin persona.
 
No hay potencias “espirituales” sin espíritu, sin persona.
 
La imaginación de un animal, por mucho que esté desarrollada, no será nunca una potencia espiritual.
 
La inteligencia y la voluntad no tiene base orgánica, son potencias espirituales que nacen en el cuerpo humano en el momento de la concepción (creación de Dios y procreación de los padres).
 
Forman parte de la naturaleza humana desde el momento de la concepción, en el momento de la creación de la persona humana.
 
Las potencias espirituales se activan por el espíritu humano, que se expresa actualizándolas.


¿Por qué describe Polo el ser humano como co-ser-con?

 .


Co-ser-con.
 
El primer co– se refiere a la apertura por dentro.
 
El segundo –con se refiere a la co-existencia con otros seres.
 
El ser humano no es “sencillo” como el ser del Universo.
Está abierto por dentro, hacia adentro y hacia afuera.


¿Por qué el ser personal es llamado co-ser?

 .


Porque la persona es co-existencia.
El ser personal no es sencillo, como el ser del universo, sino que está abierto por dentro.
 
Cada persona es un sobrar, una superabundancia de ser. Sobra como ser.
Es además, se añade.
 
Es un manantial creciente. Es inagotable.
 
El ser personal sabe de sí. Se acompaña.
Es co-ser.


¿El ser personal co-existe en solitario?

 .


El co-ser exige una referencia, un origen.
 
El ser personal se abre hacia adentro y es co-ser-en Dios.
El ser personal se abre hacia afuera, hacia el ser del universo, a su esencia y a las esencias de otras personas.
 
El ser personal no co-existe con su propia esencia, porque la esencia no es una persona, ni siquiera un acto de ser.
La esencia es su manifestación, inseparable del co-ser.


¿Qué dos trascendentales personales describen mejor la intimidad?

 .


La coexistencia y la libertad.
 
Coexistencia carente de Réplica en su interior.

Libertad o coexistencia inmediatamente activa.



¿La naturaleza humana?

.

La naturaleza humana es la vida humana en su estado inicial.


Dicho de otra manera: la naturaleza humana es el carácter inicial de la dualidad de la vida humana.

No olvidemos que la vida humana es la dualidad de la vida recibida de nuestros padres y la vida añadida por la persona (vida espiritual).

Para saber más sobre la vida humana ver la Etiqueta 6.1.0 vida humana. 

.

¿A qué llamamos realidad extramental y realidad humana?

.


No todo es "real" de la misma manera.

Por ejemplo, una cosa es lo "real extramental" y otra cosa lo "real humano".
Coherentemente, lo real extramental es estudiado por la metafísica y lo real humano por la antropología.

Viene muy bien darse cuenta de que lo "irreal" es el objeto de nuestro pensamiento.
El acto de pensar es real, pero su objeto es irreal, es intencional.


Lo real existe o coexiste aunque yo no lo piense.

El ser fuera de mi pensamiento puede ser Dios, u otra mente, o mi mente fuera de mi mente, o una sustancia física.


Glosa a Polo en Introducción a la filosofía p. 79.2 y en Antropología trascendental I, p. 111.3


.

¿A qué llamamos realidad?

.


Realidad significa "actividad".

"Lo" pensado, no es real. (El objeto pensado es irreal).

Sin embargo, el "acto" de pensar, es real.

 .

naturaleza humana

.

Corresponde propiamente el nombre de “naturaleza” a las distintas naturalezas del mundo físico, concretamente a los seres "vivientes".

Las naturalezas son sustancias físicas (causa material + causa formal) a las que se añade una causa eficiente intrínseca que les hace ser principio de operaciones. Son los seres vivos.

La filosofía clásica utiliza también el nombre de “naturaleza” para designar la esencia como principio de operaciones.
Lo que caracteriza a la “naturaleza” es precisamente el ser principio de operaciones.

La naturaleza humana es cuerpo humano + alma espiritual.

El hombre procede de un cuerpo físico o cuerpo del universo físico, pero sus operaciones,  aunque están condicionadas por el universo físico  dependen de un cuerpo "humano", es decir, un cuerpo informado por un alma espiritual (no hay cuerpo humano sin alma humana).

La naturaleza humana es pues también principio de operaciones, pero en sentido distinto a las naturalezas sencillamente físicas.

Dios nos ha creado libres en una naturaleza humana, que tiene dos dimensiones, el cuerpo humano y el alma espiritual

El cuerpo humano es la conjunción entre la vida recibida de nuestros padres, creada por Dios según el orden del universo físico, más  la vida que aporta cada persona, creada directamente por Dios.

La vida recibida de los padres es una naturaleza física "esencializada" en la persona que la recibe.
No olvidemos que una naturaleza física es materia + forma sustancial + causa eficiente intrínseca.
La primera célula viva deviene "humana", deviene vida recibida, cuando al ser apta para ser "animada", en el instante de la concepción, y no antes, es efectivamente unida a la persona humana. Es ése el momento de la creación de una nueva persona y de la vida "humana" (tanto recibida como añadida).

La vida añadida es lo que aporta el nuevo acto de ser: el ser "humano" y la esencialización. Lo que era una sencilla naturaleza física se convierte en persona humana, que aparece materialmente en el universo físico y comienza a crecer.


La vida recibida de nuestros padres es solo hasta cierto punto intracósmica, pues el hecho de proceder de dos personas humanas apunta ya a lo metacósmico, pero además, es vida "humana" (extracósmica) desde el momento de la concepción, en el que la persona es creada, cambiando instantáneamente la naturaleza de la primera célula, que será, desde entonces, manifestación de la nueva persona.

La naturaleza humana, en cuanto que recibida de nuestros padres, está abierta al universo físico, y en este sentido tiene una dimensión "retrasante" del futuro, pues está condicionada por el "antes" que es la materia.
Pero en cuanto que vida aportada por cada persona, sus operaciones no están predeterminadas. La libertad va invistiendo la esencia humana.

Hombres y mujeres tenemos la misma naturaleza humana aunque seamos individuos distintos.
La individualidad en el mundo físico es debida a la materialidad de nuestro cuerpo, pero en cuanto que el cuerpo humano está abierto por dentro coexistimos al modo "humano".
Más que individuos somos co-seres, coexistentemente libres.


Coexistimos retrasando el futuro.


Un apunte teológico: la Naturaleza Humana de Cristo es también un retraso del futuro, para unir a Dios la Creación entera.

Las naturalezas estrictamente intracósmicas (plantas y animales) están sujetas al orden del universo físico. Se despliegan según ese orden.

La naturaleza humana, sin embargo, es solamente hasta cierto punto intracósmica (ciertamente somos también materia y la causa material nos retrasa), pero al estar esencializada (pues es manifestación de una persona humana) la naturaleza humana es, de entrada, extracósmica, pues aunque el orden del universo físico le afecta (nos produce jaquecas y reumatismos) está regida por las disposiciones de la persona.

La naturaleza humana está tipificada desde su inicio, tiene unos rasgos únicos, personales. Es el cuerpo de una persona concreta, y no sólo un cuerpo con rasgos genéticos de la especie.

También naturalmente, es decir, de entrada, antes de que se manifieste la vida espiritual, lo humano es distinto de lo intracósmico, porque la naturaleza humana es típica, es la de cada quién.

La naturaleza del elefante no es típica, pues no es un don otorgado a una persona, sino, sencillamente, un número de su especie.


.

¿Cuál es el fin de la vida humana para Aristóteles?

.



La contemplación.
Por encima del mundo técnico está la contemplación.

Gracias a la mano, poseemos prácticamente el mundo, pero la práctica es inferior a la teoría, y, por lo tanto, está a su servicio, es decir, es un medio.

La inteligencia "toca", "agarra" lo que conoce con más fuerza que la mano, posee íntimamente, inmanentemente.

La relación de lo conocido con la operación de conocer es tal que lo conocido es más entrañablemente tenido que cuando se trata de la mano.

Por encima del mundo técnico está la contemplación.
El hombre es un ser capaz de "tener" de manera tal que no se le escapa lo que tiene.

Aristóteles acepta que el homo sea faber (homo faber), porque tiene según su cuerpo; pero el ser faber se asimila a la categoría "habitus" que es una leve categoría (la novena en su lista).
Por encima de ésta hay otra capacidad de tener : tener el fin. Y tener el fin es conocer. Contemplar.

Aristóteles, sin embargo, no sabe que contemplar es también amar.

De esto habla Polo en su artículo "Tres dimensiones de la Antropología", aperecido en Studia Poliana, 13, (2011), p. 20-22.

Para saber más.
Sobre la contemplación:…………..Etiqueta 12.11
Sobre la teoría y la práctica:…….Etiqueta 9.7.2
Sobre la naturaleza humana:……Etiqueta 6.1.0
Sobre el hombre:………………….…..Etiqueta 1.10
Sobre el tener:…………………..……..Etiqueta 1.9.1
Sobre el hábito categorial:………..Etiqueta 1.9.2
.

¿De quién depende la vida humana?


La vida vegetativa, como la vida animal, dependen del orden del universo.

 La vida espiritual, sin embargo, depende del ejercicio de la libertad. 
 Como el pájaro se apoya en las alas para volar en el espacio abierto de la libertad, así la persona, ser abierto, ser libre, aporta su don a su guisa, aprovechando las oportunidades que el tiempo le ofrece. .

¿Es el co-ser intensivo?

 .


No.
El co-ser, como los otros trascendentales personales, no es más o menos intenso. Es siempre más, además, busca compañía.
 
El crecimiento de los trascendentales personales es un crecimiento intrínseco, sin culminación.
 
La intensidad pertenece a la esencia, a la apertura hacia afuera del co-ser.
 
Aunque no debemos olvidar, que esencia y existencia son inseparables. Distintas pero inseparables. De ahí que el adjetivo “intensivo”, aunque pertenece a la esencia, es manifestación de la existencia.


¿Qué es esencializar?

 .


Esencializar es, para el hombre, incorporar a la propia vida. Con otras palabras: hacer crecer su esencia añadiéndole nuevas dimensiones.
 
Es, en definitiva, el crecimiento de la persona humana en su dimensión esencial, crecimiento de su vida. Nunca se separa la persona de su manifestación, que es esencial.
 
Crecimiento de su manifestarse, de su disponer, de su iluminar, de su aportar.
 
Cada persona humana es un coexistente libre. Coexistencia.
 
Cada Coexistencia, cada persona, coexiste hacia adentro y hacia afuera.
Polo habla de los tipos de coexistencia.
 
Abrirse hacia adentro a Dios.
Abrirse hacia afuera (haciendo del universo físico su mundo y coexistiendo con las manifestaciones de las demás personas)
 
Cada persona es un tipo distinto (de acuerdo con sus aperturas hacia adentro y hacia afuera).
 
Esencializar es abrirse hacia afuera, interiorizar el mundo y las demás personas.
 
El hombre esencializa (se autoperfecciona) de acuerdo con su tipo.
 
Los tipos son modalizaciones de la especie. Cada persona humana es un tipo de la especie humana.
No hay dos hombres iguales. Cada hombre, cada mujer es un tipo distinto.
Cada persona humana se autodetermina según lo que libremente manifiesta, dispone, ilumina y aporta.
 
Desde la concepción, la persona esencializa (no voluntariamente, claro) su cuerpo pues “se manifiesta” en ese cuerpo que es el suyo, aunque no lo haga todavía libremente.
 
La naturaleza humana es esencializada por Dios (elevada a ser esencia humana), en el momento de la creación de cada persona: ya no es una sencilla naturaleza física sino la naturaleza (esencia) de una persona humana concreta, que Dios ha creado en esa naturaleza.
 
Libremente, la persona ira autoperfeccionándose, en la medida en que incorpora esencialmente a Dios, a los demás y a su mundo, creciendo, añadiendo y añadiéndose.


noción de epéktasis

 .

epéktasis es para Juan A. García : ser además : 
futuro indesfuturizable. 
La persona será.
 
Glosa a Juan A. García González : Existencia personal y libertad. Anuario filosófico nº 95. 2009, p. 345.4

Yo diría que siempre habrá de ser, epéktasis, ser además 345.3

¿Qué es el carácter dual de la coexistencia?

 .


Es, a mi parecer, el siguiente:
 
-coexistencia carente de réplica.
-coexistencia en busca de replica.
 
 
La persona, en tanto que coexistente, sabe de sí, se acompaña.
 
Sin embargo, su acompañamiento es precario, pues no encuentra su origen ni fuera ni dentro de sí.
 
Por eso, inmediatamente es activa, busca, libremente hacia adentro.
 
Ahí tenemos el carácter dual de la coexistencia tal como el profesor Juan A. García Gz lo presenta.
 
Hacia afuera no encuentra réplica y hacia adentro busca réplica, sirviendo a la libertad.
 
Dual:
-coexistencia carente de réplica.
-coexistencia en busca de replica.


¿Cuáles son las dimensiones de la vida humana?

.



Las dimensiones de la vida humana son la fe,
el trabajo
y la amistad.

La fe es el conocimiento del encargo que hemos recibido al nacer.

El trabajo es la realización esperanzada del encargo.

La amistad es la felicidad del destino compartido.

fe se corresponde con el Inteligir personal.
trabajo se corresponde con la Libertad trascendental.
amistad se corresponde con el Amar personal.

La persona humana, que es "además" o co-ser, humildemente las conjunta, al aceptarlas. Así su vida se consuma.
(por la puerta de la humildad pasa la oración: relación subsistente "hacia" el Origen).


.

¿Qué es ser “además?

 .


La persona humana es “además”.
 
 Para caracterizar a la persona humana, que Polo llama “además”, no basta decir que es ser alguien en lugar de algo (como dicen los personalistas) o decir que el otro (la persona) no es un ser abstracto (Levinas).
 
Ser además, o sea, ser persona humana, es ser un ser que se acompaña, que sabe de sí.
 
Se le puede llamar co-existente o co-existencia. Ese acompañar es el “carácter de además”.
El además existe acompañándose a sí mismo.
 

Ideas sacadas del “compendio” de Antropología “el hombre como persona” de Juan A. García González.


¿Qué es el carácter de además?

 .


Ser además, o sea, ser persona humana, es ser “un ser que se acompaña”, que sabe de sí.
 
Se le puede llamar co-existente o co-existencia.
Ese acompañar es el “carácter de además”.
El además existe acompañándose a sí mismo. Es intimidad.
 
Usando metódicamente del carácter de además (manteniendo el conocimiento del acompañar) se pueden alcanzar los cuatro trascendentales personales. Y eso es el hábito innato de sabiduría: el uso metódico del carácter de además.
El ejercicio de este hábito equivale al abandono del límite del conocimiento en su tercera dimensión.
 
“Uso metódico” significa servirse de algo para obtener otro tema.
La persona humana como tema es además.
Pero usando de ese “además” podemos descubrir los cuatro trascendentales o sentidos del ser personal.
 
En cuanto tema, pues, el carácter de además es precisamente el acompañar o acompañarse propio del co-ser y equivale a transparencia, es luz transparente, que nos acompaña siempre, pues siempre podemos saber de nosotros mismos. Sé de mí. Soy persona.
 
Eso es lo que caracteriza a la persona humana: el saber de sí.
 
Decir "además" es, pues, decir persona como intimidad, y es conocer que también podemos acompañarnos hacia adentro, hacia nuestro Origen.
 
“Además” no es otra cosa que el co-acto personal, co-existencia, co-ser, además o intimidad. La persona humana, vamos.
 
Este acompañamiento (hábito de sabiduría), solidario con la intimidad, es lo que Polo llama carácter de además.
 
 
De esto se habla en L. Polo. Antropología trascendental. Tomo I. La persona humana. p. 180.2; 182; 182.3


¿Por qué Polo utiliza la expresión "carácter" de "además"?

 .


Polo utiliza la expresión “carácter” de “además” porque "caracteriza" a la persona como un ser "además", un ser que se acompaña, que sabe de sí.
 
De esto habla Juan A. García en su monografía "Y además". Escritos sobre la Antropología trascendental de Leonardo Polo. 1ª edición, Delta, San Sebastián 2008.
 
 
Son dos los sentidos del carácter de "además" :
a) estar más allá del pensar y
b) ser adverbio de Dios y de los demás.
 
a) “Además” como método (ser más allá del pensar) o hábito innato de sabiduría.
b) “Además” como tema (alcanzarse como transparencia) o ser “hacia”.
 
Éste carácter se encuentra en los cuatro trascendentales personales descubiertos por Polo.
 
a) La 3ª dimensión del abandono del límite mental, permite b) alcanzar el tema del hábito de sabiduría: el ser personal.
 
Como somos “además” del pensar, alcanzamos a conocer, por el hábito de sabiduría, que la persona sobra, es más que la operación intelectual. Es "además". Éste es su primer sentido.
 
Pero como la persona es inagotable, al alcanzar con su sabiduría su condición de "además", al ser siempre "además", se torna en búsqueda de su réplica, búsqueda de Aquél que acogerá su don. Y así alcanzamos otro sentido del carácter de "además": el ser "adverbio", somos hijos de Dios en el Verbo.
 
 
(Juan A. García González : Existencia personal y libertad. Anuario filosófico nº 95. 2009 p. 340.4).


¿Qué es estrictamente la apertura interior?

 .


La apertura interior es el “co-ser – libre”.
Trascendental co-existencia + trascendental libertad.

El ser que se acompaña se da cuenta de que es interiormente activo y que el valor activo de la intimidad es libertad.
Por eso la apertura íntima considerada como actuosidad libre Polo la denomina apertura interior: «el descubrimiento de la intimidad como apertura interior es inseparable del valor activo, libre, de la co- existencia».
 
En pocas palabras, «la co-existencia es activa, y la índole de esa actividad es la libertad».


El Co-ser no tiene Réplica en su interior. 
El hombre, cuando sabe de sí mismo se encuentra solo.

 La intimidad es precaria porque sola es imposible.La coexistencia carente de réplica es el trascendental personal inferior. Estoy solo.

Pero es una coexistencia inmediatamente activa (libertad, que es el segundo trascendental personal).

Coexistencia libre. Activa. Subsistente.

 Pero si la persona es relación "subsistente", su intimidad es precaria. Yo debería ser "dos".
El saber de sí debe continuarse hacia adentro.
 Debe buscarla. Y debe buscar la Réplica que sea aceptada por Dios.

¿Qué son los dones preternaturales?

.



En la antehistoria, la naturaleza humana recibe unos dones condicionados a la obediencia libre a Dios. Son los dones preternaturales:
- inmortalidad,
- inmunidad del dolor,
- ciencia proporcionada a su estado e
- integridad de las pasiones (sumisión de los sentidos a la razón).

Los dones preternaturales preservaban a la naturaleza humana del dolor y de la muerte.

Y gracias a la comunión con Dios, las personas humanas conocían lo necesario para crecer libremente, y multiplicarse, sin equivocarse (pues al obedecer a Dios no se conoce el mal), tenían la ciencia del bien, pero no del mal.
Los apetitos estaban ordenados a dar gloria a Dios.

El Verbo, al anonadarse, al hacerse como nosotros sin los dones preternaturales, asume el dolor y la muerte, manifestando así la misericordia de Dios, que quiere que reconozcamos por nosotros mismos, que nos habíamos equivocado.
<tras la muerte de un ser querido, reconocemos mucho mejor cuánto le queríamos>.
.