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¿Qué ventaja saca la persona de vivir en sociedad?

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Gracias a la vida en sociedad, la persona humana adquiere  o conquista su "personalidad".

Gracias a sus decisiones,  esencializa el "tipo" que quiere ser.

Por ejemplo, en la medida en que se aceptan y asimilan, los tipos básicos de hombre y mujer son esencializados, incorporados a su personalidad.

La masculinidad o la feminidad se ponen así, éticamente, al servicio de la sociedad.







De esto habla Polo en "Ética". Hacia una versión moderna de los temas clásicos. 2ª edición. Unión Editorial. p. 71


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¿Son lo mismo las normas éticas que las normas jurídicas?

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Tanto las normas éticas como las jurídicas son exclusivas del hombre. No hay ningún animal que tenga costumbres y derecho (llamo costumbres a maneras de conducirse de acuerdo con la cultura o la civilización).

Pero el derecho y las costumbres culturales son normas derivadas de las normas éticas.

Las normas éticas son las originarias porque son inseparables de la libertad. Son leyes del ser libre para ser libre.

Las leyes físicas y las leyes psicológicas dependen de la biología del animal, son leyes que se cumplen automáticamente.

Las leyes del derecho y de las costumbres, aunque derivadas de las normas éticas, tienen también algo de automático, no son tan inseparables de la libertad, como las normas éticas.

El semáforo rojo me detiene casi automáticamente (aunque yo guarde la posibilidad de saltármelo). Su incumplimiento no me esclaviza. Por ejemplo, no pierdo mi libertad si alguna vez, cuando no pasa nadie un domingo temprano, me lo salto. Soy más libre saltándomelo.

No pasa lo mismo con las normas éticas, pues si mato al inocente, pierdo mi libertad arrastrado por la pasión. Si asesino, me pierdo. Si robo, me pierdo. Libremente debo siempre amar. Si no amo, me pierdo.

Las normas éticas no son mecanismos, no nacen por consenso. Me obligan, porque soy libre y para ser libre. Puedo conculcarlas, y entonces me pierdo. Puedo seguirlas, y entonces me gano.
Vivir éticamente es ganar tiempo.












De esto habla Polo en "Ética". Hacia una versión moderna de los temas clásicos. 2ª edición. Unión Editorial. p. 61


Para saber más:
sobre normas, bienes y virtudes, ver etiqueta 9.1.4
sobre la ley natural, ver etiqueta 6.2.0
sobre la cultura, ver etiqueta 7.2.0


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¿Son las normas éticas el resultado de convenciones, pactos o tradiciones culturales?

.El pactismo es una doctrina bastante abundante en la edad moderna; recuérdese, por ejemplo, el contrato social de Rousseau.

Pero si las normas éticas fueran puras convenciones, o lo que es peor, si fueran naturales en el sentido biológico (como la leona cuida a sus cachorros), entonces no se pueden tomar en serio, porque no concernirían mi libertad trascendental.

O las cumpliríamos necesariamente (como hacen los leones) o consistirían en un ajuste, todo lo democrático que se quiera, a un destino impuesto.

Sin embargo, el destino no se impone, por ser libre. El ser que es libr, se destina a su destino y las leyes éticas son las leyes del ser libre para ser libre, para destinarse: "haz el bien para crecer".

El hombre libre debe encontrar el bien y capacitarse al amor, queriéndolo, libremente.

Si estas leyes no existieran, si no tuviéramos el deber de buscar el bien y de crecer en el amor, seríamos animales.

El que considera la ética como un código pactado de conducta para que los lobos no se coman a los lobos, o para que juntos vivamos mejor, limita su horizonte a la biología. Se reduce a vegetar, a rumiar y, a lo más, a procrear.

Esto es gravísimo para el ser que va más allá de su especie; para el ser que está abierto, por dentro.













De esto habla Polo en "Ética". Hacia una versión moderna de los temas clásicos. 2ª edición. Unión Editorial. p. 61.2


Para saber más:
sobre normas, bienes y virtudes, ver etiqueta 9.1.4
sobre la ley natural, ver etiqueta 6.2.0
sobre el destino, ver etiqueta 13.0.0
sobre la humanización, ver etiqueta 9.2.1
sobre la responsabilidad, ver etiqueta 1.1.2
sobre la distinción hombre-animal, ver etiqueta  4.6.1
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¿Cómo aparecen las leyes naturales?

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Hemos de distinguir entre las leyes naturales éticas, propias del ser libre, que nacen con la libertad y las leyes naturales físicas o biológicas.

Aquí respondemos a la pregunta sobre las leyes naturales físicas, que son leyes que no pueden ser incumplidas.

Es uno de los grandes problemas de que se ocupa la mecánica cuántica. Aunque hay todavía algunos puntos oscuros, la explicación encontrada es bastante válida.

Según una historia que comienza con la expansión del universo, un poco más tarde que el big-bang, en un tiempo anterior a la evolución biológica (pues la vida aún no apareció.

Al expandirse el universo, según los físicos cuánticos, la frecuencia de los fotones disminuye, varía su energía y se pasa a un universo en polvo en el que ya hay núcleos, y a partir de los núcleos se forman los átomos.

La gravedad (ley natural física) aparece o empieza a funcionar cuando la energía de los fotones disminuye. Los átomos pesados se forman después y no existen en todo el universo, sino en algunas regiones suyas.
En definitiva: según el estado energético aparecen unas leyes u otras, que no pueden dejar de cumplirse y que están contenidas en las condiciones iniciales del universo.
Las leyes físicas expresan estados energéticos distintos.

Comprendan ustedes que la aparición de las leyes naturales físicas es de un orden distinto de las leyes naturales morales (del ser libre).
Las físicas se cumplen siempre.

Las morales pueden cumplirse o no, pues son el camino de la libertad. Son leyes del ser libre para ser libre.

El "deber" no aparece por un cambio energético. No es que nuestros átomos pesados se conviertan en ligeros.
El ser libre es inmaterial y espiritual.

También los perros tienen facultades inmateriales (la vista, el olfato, la memoria, la estimativa, etc.,) con base orgánica.
Si el perro tiene miedo y huye no es porque sus átomos pesados se hagan ligeros (de helio, por ejemplo), sino porque capta inmaterialmente el peligro (sin darse cuenta, porque no tiene conciencia).

En el universo físico hay sobrantes formales, inmateriales, que aparecen en el transcurso de la evolución. Se trata de leyes naturales biológicas. Que se cumplen siempre: el perro que tiene miedo, huye despavorido.

Con el hombre aparecen "novedades". cada persona es extracósmica, libre. Su naturaleza ha sido conectada a un quién, que conduce éticamente su vida. Si quiere.







De esto habla Polo en "Ética". Hacia una versión moderna de los temas clásicos. 2ª edición. Unión Editorial. p. 61.3


Para saber más:
sobre normas, bienes y virtudes, ver etiqueta 9.1.4
sobre la ley natural, ver etiqueta 6.2.0
sobre la esencia del universo, ver etiqueta 4.0.0
sobre la evolución, ver etiqueta  9.1.0



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¿Qué es la congruencia en la antropología poliana?

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Polo tiene un epígrafe consagrado a la congruencia en "Presente y futuro del hombre" p. 126.2.

"Propongo llamar "congruente" al acto que logrando una forma, en estricta contemporaneidad con esa forma, no es menor que ella.
Congruente es el acto que no es menor que la forma que logra."

Noten que no estamos aquí en consideraciones físicas en las que, por ejemplo, cuando tenemos la casa, ya cesó el acto de edificarla.

Al conocer, seguimos conociendo. Lo conocido es congruente con el conocer.
Existe coincidencia y separación entre el conocer y lo conocido.

Nuestro entendimiento entiende formando y formando entiende.
Si no forma no entiende, pero formando entiende.

La congruencia (el mantenimiento de la separación y su coincidencia) (la dualidad o co-acto) es el signo y requisito más alto de la verdad, muy por encima de la mera no contradicción, o mera pensabilidad (Falgueras).

La verdad se desvela congruentemente. Manteniendo la separación y la coincidencia.

El filósofo busca una mayor congruencia entre método y tema (Rojas)

El método es siempre un acto cognoscitivo en dualidad con su tema.
El método es el modo de acceso a los temas.
El método se dualiza con el tema, por lo que tampoco se puede considerar el método aislado. No cabe la consideración aislada del puro método.

La congruencia más profunda en la persona humana es precisamente el Inteligir personal (la persona como inteligir) que se dualiza o desdobla gracias al hábito innato de sabiduría.
Esta actividad intelectual humana, dual en su raíz, la denominamos "congruencia" o "conveniencia dinámica".


Existe congruencia entre el método del Inteligir (hábito de sabiduría) y su tema (la persona como Inteligir).
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