.
Todo ser vivo se hiperformaliza. Es el modo de crecer propio de los seres vivos.
Pero el hombre se hiperformaliza "dualmente". Tratemos de explicarlo.
La formación de cualquier ser vivo está presidida por una torre de control que retiene los cambios, se hiperformaliza y asegura que el ser vivo devenga árbol, okapi o niño.
La estructura se diferencia, se hace más compleja, se hiperformaliza, en la media en que se actualizan posibilidades de su naturaleza.
Todo ser vivo crece.
Pero en el ser humano existe una novedad : a la vida recibida de los padres se añade la vida que pone la persona.
El óvulo fecundado es ya de una persona concreta que podrá añadir vida espiritual cuando el cerebro adquiera las condiciones necesarias para expresarla.
La vida recibida de los padres crece, como en los animales, pues forma parte de la vida que existe en el universo, la vida intracósmica, vida vegetal o animal. Pero en el caso del hombre a esa vida recibida se añade la vida personal.
Se añadirá una hiperformalización que no está prevista en la naturaleza, que permite la introducción de novedades.
Glosa a Genara Castillo. Planteamiento poliano de la constitución y desarrollo de la vida humana. Studia Poliana 11, p.14
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario